Batidora a Las Palmas de Gran Canaria
Hemos tenido un principio de vuelta al mundo de los más movidito! Salimos a fuego de La Graciosa con tres rizos en la mayor, el mar estaba durillo, la ola nos entraba por la amura y empezó a batirnos… cada vez que alguien entraba dentro a hacer algo, salía con la cara pálida y la tripa en un puño. No pensaba que después de tantos años navegando, y habiéndome mareado sólo una vez, el primer día del viaje iba a ser tan duro, ¡vaya meneito! Aunque cuando el cielo se ha despejado y han aparecido millones y millones de estrellas, de esas que sólo se ven desde alta mar (o alta montaña), se nos han olvidado todo los males. Hemos recorrido unas 130 millas en 19 horas, buenísimas media de casi 7 nudos! Buen trabajo Freya!! Parecíamos un carro tirado por delfines!
Hemos llegado al amanecer al Puerto de la Luz, y nos hemos echado una merecida siestecilla. Luego paella de Cabo, que no pudimos ni calentar en marcha.
Muchas gracias a Cabo, Cris y Juanmix por vuestra ayuda y vuestras guardias!
